La gestión pasiva se ha convertido en una de las filosofías de inversión más aplaudidas y seguidas entre los inversores, tanto en Europa como al otro lado del Atlántico.
Su sencillez, sus bajas comisiones y la posibilidad de obtener una rentabilidad similar a la del mercado, y superior a la de la mayoría de fondos de gestión activa, son factores demasiado interesantes como para dejarla pasar.
A este éxito ha contribuido también la amplia variedad de instrumentos que existen para llevar a cabo una estrategia de gestión pasiva efectiva, entre los cuales destacan los fondos indexados y los ETF.
Si bien ambos productos parten de una base similar, la de replicar el comportamiento de ciertos índices, en realidad son bastante diferentes entre ellos.
Las grandes preguntas son: ¿qué es mejor, un fondo indexado o un ETF? ¿Cuáles son sus similitudes y sus diferencias?
Vamos a analizar en detalle una y otra opción para que te sirva como base y puedas elegir la opción que mejor se ajusta a tu perfil.
Contenidos
Qué es y cómo funciona un fondo indexado
Un fondo índice o indexado replica la evolución de un determinado índice bursátil a través de un fondo de inversión.
Los gestores del fondo tan solo tienen que escoger qué activos formarán parte del fondo y en qué proporción, con el fin de que su evolución esté ligada de manera más o menos fiel a la evolución del índice de referencia (también conocido como benchmark).
La principal ventaja de los fondos indexados con respecto a los fondos de inversión tradicionales de gestión activa es su coste.
Las comisiones son mucho más reducidas porque el gestor no tiene que buscar de forma activa qué activos componen la cartera, al venir dados ya por el propio índice.
Y lo que quizá es más importante: estos bajos costes no están reñidos con una calidad menor, entendida en términos de rentabilidad. De hecho, se estima que en torno al 80% de fondos de inversión de gestión activa no consiguen superar al IBEX en España de forma consistente, lo que da una buena idea de la rentabilidad de este tipo de productos. Es un fenómeno que se extrapola al resto del mundo (estudio).
Para contratar un fondo indexado, debemos utilizar alguno de los brokers que disponen de ellos. Hasta hace relativamente poco, las opciones en nuestro país eran más bien escasas, pero poco a poco han ido incrementando como hablamos en este artículo sobre brokers de fondos indexados en España.
A dia de hoy, la plataforma de inversión predilecta para el inversor pasivo español es Myinvestor, ya que ofrece una oferta muy amplia de fondos indexados de las principales gestoras, sin comisiones de custodia ni mínimo de inversión.
Por otra parte, esto es un ejemplo de las principales gestoras de fondos indexados a nivel mundial:
Qué es y cómo funciona un ETF
Las siglas ETF significan Exchange Traded Fund o fondo cotizado, y su seña de identidad es que combina las características de un fondo de inversión y de una acción.
A efectos prácticos, esto quiere decir que un ETF es un fondo de inversión que cotiza como una acción, lo que afecta tanto a su operativa como a su contratación.
Al igual que las acciones, los ETF cotizan en bolsa, de modo que se pueden comprar y vender en cualquier momento al precio de cotización en ese momento.
Su dinámica, que al final marca su precio de cotización, se basa en dos factores: por un lado, la variación de los activos que componen las carteras subyacentes y, por otro, su oferta y su demanda en bolsa.
La principal ventaja con respecto a las acciones es que los ETF son instrumentos mucho más diversificados. Con un solo título, y con el mínimo que marque su cotización, podemos tener una cartera diversificada y ajustada al perfil de riesgo del inversor.
En España, la mayoría de brokers disponen de ETFs en los que se puede invertir dentro de sus productos de inversión, por ejemplo DeGiro ofrece una amplía gama de ETFs, algunos incluso sin comisiones de ningún tipo.
Estas son algunas de las principales gestoras de ETFs a nivel mundial:
Diferencias entre fondos indexado y ETF
Pero vayamos al quid de la cuestión: ¿cuáles son las diferencias entre un ETF y un fondo indexado?
Aunque parecen instrumentos similares, lo cierto es que hay muchas características que les hacen ser bastante diferentes. Te las resumimos:
➡️ El tratamiento fiscal
La diferencia más importante entre los fondos indexados y los ETF es su fiscalidad en España, especialmente en lo que tiene que ver con los traspasos.
En un fondo indexado es posible traspasar parte o la totalidad de nuestra inversión a otro fondo de inversión sin peaje fiscal.
Un ETF, sin embargo, tributa como una acción normal, es decir, habrá que vender primero para comprar después, declarando y pagando a Hacienda por los beneficios obtenidos.
Esta diferencia es fundamental para llevar a cabo una estrategia completa de gestión pasiva, pues, en el caso de los fondos, permite rebalancear la cartera sin coste, pero en el caso de los ETF, no.
Diversas iniciativas están intentando modificar la normativa para equiparar el tratamiento fiscal de los ETF al de los fondos indexados en materia de traspasos, para de esta manera armonizar dos instrumentos tan similares.
Sin embargo, actualmente el traspaso no es posible entre ETF españoles y, según Hacienda, no parece que vaya a ser posible en algún momento cercano (artículo).
➡️ La cotización en tiempo real
Los ETF cotizan en bolsa como una acción normal y corriente, por lo que es posible comprarlo y venderlo en tiempo real al precio vigente en ese momento.
Un fondo indexado, por norma general, calcula su valor liquidativo de forma diaria, al finalizar la sesión o a una hora de corte establecida por los estatutos.
Esta ventaja juega a favor de los ETF. El inversor conoce en todo momento el precio al cual compra y vende, y lo puede hacer en tiempo real, lo que además aumenta la transparencia de las operaciones.
En el caso de los fondos indexados, no sabemos exactamente cuál será su valor liquidativo en el momento en el que se produzca la operación de compraventa y, además, la orden no es instantánea. Al hacer una operación tarda varios días en ejecutarse (los días exactos variarán según el fondo). Lo mismo ocurre al hacer un reembolso, aunque en este caso sí que encontramos un límite máximo de 3 días laborales para la mayoría de fondos según indica la CNMV.
➡️ Las comisiones
Las comisiones también son diferentes en el caso de un fondo indexado y de un ETF. Así, mientras en los primeros no suele haber comisiones de suscripción y reembolso (aunque algunas gestoras sí las aplican), en los ETF existe una comisión de compraventa (o brokeraje) cada vez que se produce una operación, igual que las acciones.
Por otra parte, tanto los ETFs y fondos indexados incluyen una comisión de gestión, igual que otros fondos de inversión, que se deduce diariamente y de manera implícita del valor liquidativo. Esta comisión suele estar entre el 0,10 y 0,30% anual, siendo las de los ETFs más bajas de media.
📌 Nota: Si tenemos en cuenta las comisiones de compraventa y de gestión, los ETFs suelen salir a cuenta cuando podemos hacer aportaciones periódicas de gran volumen (p.ej. 3.000€). En caso de que queramos hacer aportaciones mensuales más pequeñas, los fondos indexados ganan la partida de las comisiones.
➡️ Oferta y accesibilidad
Es, con toda seguridad, el principal talón de aquiles de los fondos indexados. En España, su oferta es algo limitada aunque ha mejorado mucho en los últimos años.
Y esto a pesar de que cada vez son más las entidades que los incluyen dentro de su oferta de fondos y de que cada vez son más los gestores automatizados de inversiones que operan en nuestro país a través de ellos.
La realidad es que los fondos indexados son productos baratos con los que las entidades no consiguen mucho margen de intermediación. Como consecuencia, no les interesa comercializarlos y, a veces, cuando lo hacen imponen unas condiciones demasiados exigentes (por ejemplo, Renta 4 cobra una comisión de custodia adicional).
Los ETF, en cambio, se pueden encontrar en casi cualquier bróker que opere en el mercado español.
Además, su oferta suele ser bastante más extensa que la de los fondos indexados, incluyendo incluso ETFs sectoriales que replican índices de sectores concretos, como biotecnología o inteligencia artificial.
➡️ Diferentes posibilidades
La operativa con los fondos indexados se limita a la compra de participaciones del mismo y a seguir su evolución a lo largo del tiempo. No hay nada más que hacer.
Con los ETF no sucede lo mismo.
Hay ofertas de productos derivados para todos los gustos: apalancado, doblemente apalancado, inversos, etc. Dicho esto, ten en cuenta que muchos de ellos incrementan el riesgo de la operación, por lo que nos son recomendables para novatos.
Entonces, ¿es mejor un fondo indexado o un ETF?
La respuesta a esta pregunta, como en casi cualquier otra alternativa de inversión, depende de muchos factores.
Los ETF son, generalmente, más baratos y más fáciles de contratar y de seguir, pero su desfavorable tratamiento fiscal continúa siendo la principal razón por la que muchos inversores siguen apostando por los fondos indexados.
Esto es especialmente significativo cuando hablamos de estrategias de inversión como el rebalanceo, porque implica comprar y vender con un ETF (con bocado para Hacienda de por medio), mientras que con un fondo indexado se puede realizar a través de los traspasos sin peaje fiscal.
Los roboadvisors, de hecho, utilizan en su mayoría fondos indexados para llevar a cabo su estrategia de inversión debido a la importancia que le dan a los rebalanceos (en este artículo puedes ver la comparativa de los mejores en España).
Gracias a esa importante ventaja fiscal, los fondos indexados continúan siendo el instrumento preferido por los inversores para constituir su propia cartera de inversión de gestión pasiva.
Ahora que ya sabes cuál es la principal diferencia entre un fondo indexado y un ETF, puedes valorar si te compensa más uno u otro a la hora de componer tu cartera de gestión pasiva.
Totalmente de acuerdo con el artículo y con tu conclusión. Cada inversor es un mundo, pero si quieres mantenerte alejeado de tus inversiones a largo plazo, decidirse por un fondo indexado de bajo riesgo es una excelente opcion. Gracias, se agradece siempre la voz de un experto.
¡Muchas gracias!
Hola,
El Fogain cubre 100.000 por cada fondo/ETF?
He leído que si el importe supera cierta cantidad, es aconsejable diversificar más allá de un fondo que replique la renta variable global y otro fondo que replique la renta fija global. Por algun motivo en concreto?
Saludos,
Hola Enrique, el FOGAIN cubre hasta 100.000€ para una misma entidad, no por cada fondo o ETF.
Hola, Guillem. Soy novato y estoy a punto de invertir unos 20000€ en gestión pasiva. Según las webs de los roboadvisors que gestionan ETF, las comisiones son parecidas (si no iguales) a las de los fondos indexados. Yo tenía entendido que salía bastante más caro tener ETF. No es así?
Otra pregunta: aconsejas ETF o fondos indexados en este momento de Covid19? Tengo pensado invertir 1/2 y 1/2 en cada cosa, pero si una es demasiado arriesgada, prefiero asegurar al máximo. Mi perfil es 5 en dondon y 2 en ETF. Gracias anticipadas por tu amable respuesta y saludos.
Hola Álvaro, aquí en España las comisiones de compraventa de ETFs suelen ser elevadas. En el caso de Inbestme (único roboadvisors español con carteras de ETFs) utiliza Interactive Brokers para ese fin, por lo que le sale más a económico.
En sí los ETFs y los fondos indexados pueden dar un resultado muy parecido si invierten en los mismos activos. Ejemplo: un etf del SP500 y un fondo indexado del SP500. Lo más importante no es la «carcasa» sino el «contenido», es decir, el índice al que replican.
De todas formas, personalmente soy más partidario de fondos indexados ya que tienes más flexibilidad fiscal como explicamos en el artículo. Si tienes dudas en este aspecto quizá lo más sensato es empezar invirtiendo en un robo-advisor, donde es muy difícil equivocarte.
Un saludo!
Buenos días, sería deseable saber también si en relación a la composición del índice que sigue tanto un fondo como un ETF, las participaciones que poseemos al comprar se traduce en si somos poseedores de la cantidad en acciones equivalentes o solo somos poseedores de un derivado sustentado por la empresa creadora del ETF.
Es decir si compramos participaciones de un fondo y de un ETF, y sea por lo que sea quiebra la creadora del producto, la gestora, la depositaria, etc… ¿que tendriamos?
Gracias por adelantado por la respuesta.
Hola Jorge,
Es muy improbable que eso pase, pero en tal caso se aplicaría el FOGAIN que cubre hasta 100.000€.
Espero haber resuelto tu duda.
Un saludo!