Todos los consejos de ahorro que vas a encontrar en esta guía del ahorro están organizados por categorías, así la lectura te resultará más fácil.
Te avisamos: son muchos consejos. Pero, muchos, muchos…
Así que igual te conviene copiar y pegar los elementos que más te interesen y hacerte una lista propia que repasar de vez en cuando.
¿Estás preparado?
Contenidos
Listado de trucos y consejos para ahorrar
💡 Ahorro en las facturas
Empecemos por el ahorro en las facturas de los diferentes servicios que usamos habitualmente en casa.
Compara compañías y no seas fiel
Lo cierto es que los márgenes de mejora entre compañías de luz, gas y agua no suelen ser espectaculares. Pero estamos hablando de lonchafinismo, así que cada euro cuenta. Compara y elige la opción más barata.
Muchas veces permanecemos en una compañía por simple costumbre, y eso nos cuesta, al cabo del mes, 10 o 20 euros. Están mejor en nuestro bolsillo que en el suyo.
Lee (y entiende) tus facturas
Sí, lo sé. Nadie lee las facturas. Entre otras cosas, porque son incomprensibles. Pero haz un esfuerzo. Nunca sabes si te están cobrando algo que no deberían o si tienes alguna posibilidad de reducir la factura. Y la respuesta está en las facturas.
Contrata menos potencia eléctrica
Obviamente, depende de la situación en la que estés. Pero en no pocos casos se tiene contratada una potencia eléctrica superior a la necesaria. Puedes contratar menos potencia y te cobrarán menos cada mes.
Incluso aunque tengas la potencia adecuada, puedes contratar menos y ser más eficiente en tu consumo (por ejemplo, no poniendo varios electrodomésticos al mismo tiempo).
Plantéate la discriminación horaria
La discriminación horaria es una tarifa eléctrica en que pagamos más o menos por la luz en función de la hora en que la utilicemos.
Generalmente, no es recomendable, porque hace que el precio durante el día sea más caro. Pero si haces vida nocturna (por la razón que sea), te puede ayudar a ahorrar un buen dinero.
No contrates más megas de los necesarios
Con 20 megas es suficiente para ver Netflix con una buena calidad. Con más de eso, lo único que ganas es descargar más rápidamente las cosas. Pero… ¿De verdad necesitas descargar algo en un minuto? ¿No puedes esperar diez?
Tenemos tendencia a querer el máximo de todo, y no siempre es necesario. Pregunta a tu compañía de Internet si pueden reducirte la tarifa reduciéndote los megas que recibes.
Comparte suscripciones
HBO, Netflix, PrimeVideo, Spotify, Disney Plus… ¡Son demasiadas suscripciones!
Por suerte, la mayor parte de ellas permiten compartir las cuentas, así que puedes reducir el coste de las mismas al mínimo.
Elimina suscripciones
Naturalmente, también puedes eliminar suscripciones. Si tienes varias, lo más probable es que apenas veas una o dos series de cada una de ellas.
¿Por qué no te quedas sólo con Prime, que te sale gratis si ya tenías contratado el Prime por los envíos rápidos, y ves las series, películas y documentales que hay ahí?
Y, si en otra plataforma sale algo que te interesa mucho en algún momento, pues lo pagas de manera puntual para ver esa serie. Pero tener media docena de suscripciones activas a la vez es tirar el dinero.
Contrata menos datos y supera tu adicción al móvil
Salvo que utilices el móvil por motivos de trabajo, lo más probable es que te sobren datos. Si reduces los datos de tu móvil, pagarás menos y, además, estarás menos pendiente del móvil. Y, ya en casa, puedes conectarte al WiFi.
Estás en la calle, coño, presta atención a la vida.
Plantéate utilizar el bono social
Sí, sé que a nadie le hace gracia recurrir a la beneficencia ni a los subsidios. Pero, si estás pelao, es lo que toca. Tienes bonos sociales para el agua, la luz y la calefacción. Puedes mirar si cumples los requisitos para recibirlo.
Además, no te sientas mal. Plantéatelo del siguiente modo: estás recuperando parte del dinero que te quitan vía impuestos.
¿No puedes mudarte?
Por último, plantéate mudarte. No todo el mundo puede, pero es una opción. Una casa más pequeña suele tener facturas más reducidas.
Además, en algunos pisos el agua y la calefacción son centrales, así que te puedes ahorrar esas facturas.
🏡 Ahorro en el hogar
Vamos ahora con el ahorro en el hogar. En parte tiene que ver también con el ahorro en facturas, pero son consejos más orientados a optimizar la casa y no tanto las facturas en sí.
Ya lo verás.
¿No te sobran figuritas?
En primer lugar, las casas están llenas de cosas que no se necesitan. Cosas que se van acumulando porque alguien fue de viaje y te trajo un muñeco más feo que pegarle a un padre o cosas que compraste y no utilizas. Todo eso lo puedes vender. Así de simple.
Salvo que tengas mucho apego emocional a lo que tienes, puedes sacar un dinero de ahí y ganar espacio en casa al mismo tiempo.
Instala luces LED
Las luces LED son las más caras, pero, al mismo tiempo, las que más durabilidad tienen y las que menos consumen. Así que, si cambias todas las bombillas de casa por iluminación LED, ahorrarás una buena cantidad de dinero a largo plazo.
Aprovecha la luz natural
Evidentemente, siempre que puedas, sube las persianas y utiliza la luz natural. No sólo ahorrarás dinero, sino que estarás más sano (¿sabías que la mayoría de la gente en España tiene déficit de vitamina D? ¡Incluso en Canarias!).
No planches tan a menudo
La plancha consume relativamente poco cuando está caliente. Cuando más consume es cuando la enciendes y se está calentando. Así que, si acumulas ropa y la planchas toda de golpe, ahorrarás más que si planchas varias veces un poco de ropa.
Compra electrodomésticos eficientes
Evidentemente, si tu lavadora está bien, no la cambies. Pero, en el caso de que tengas que cambiar algún electrodoméstico porque se ha estropeado, apuesta por uno con eficiencia energética A+++. Son un poco más caros, pero consumen mucho menos, así que, a largo plazo, salen más baratos.
Además, en algunas ocasiones existen ayudas a la compra de electrodomésticos eficientes, así que quizá puedas encontrar algún descuentillo que aprovechar.
El más importante es el frigorífico
El electrodoméstico más importante y que más consume es el frigorífico, porque es el que se pasa todo el día encendido. Así que, si tienes que elegir qué electrodoméstico compras A+++, que sea éste. Además, debes tratarlo bien con los consejos que te daremos a continuación.
Ubica el frigorífico en un lugar fresco
Si puedes colocar el frigorífico en un lugar que de por sí es más fresco que la media de la vivienda, evitarás que gaste más energía de la necesaria.
Existen, incluso, una especie de “armarios térmicos” parecidos a los que se usan para cultivar marihuana (cada uno tiene las referencias que tiene) que evitarán que entre más calor del necesario en el entorno de la nevera.
No guardes productos calientes en el frigorífico
Si guardas productos calientes en el frigorífico, lo que haces es bajar la temperatura del mismo y hacer que tenga que encenderse y refrigerar. Deja la comida caliente reposando en el exterior y, cuando esté fría, la metes.
Mantén el frigorífico lleno
Cuanto más lleno esté el frigorífico, menos aire caliente entrará cada vez que abras la puerta, por lo que mantendrá mejor el frío y no tendrá que encenderse tanto para refrigerar.
No abras y cierres la puerta del frigorífico continuamente
Evidentemente, cuantas menos veces abras la puerta, mejor. Si estás constantemente abriendo y cerrando la puerta te cargas el microclima ártico que hay en el interior.
Abre sólo cuando sepas lo que quieres y saca todos los productos que vayas a necesitar para cocinar a la vez.
Descongela el congelador
Si tu frigorífico no es nofrost, tendrás que descongelar el congelador un par de veces al aire. Aunque parezca mentira, no hacerlo conducirá a que gaste más energía (la verdad, no me preguntes por qué pasa esto, pero pasa).
Utiliza más el microondas
El microondas consume muchísima menos electricidad que el horno, así que debería ser tu electrodoméstico por defecto. No pasa nada si tienes cosas que cocinar en el horno. Pero si algo se puede hacer en cualquiera de los dos, apuesta por el microondas. Además, es más rápido.
Usa la olla a presión y el robot de cocina
La olla a presión permite calentar y cocinar las cosas mucho más rápidamente al evitar que se pierda energía mediante la evaporación.
Por su parte, el robot de cocina, además de ser una olla a presión en sí mismo, está ya pensado para gastar la energía mínima imprescindible para hacer una comida.
No precalientes el horno más de lo necesario
Si utilizas el horno, no lo precalientes más de lo necesario y tampoco lo pongas a máxima potencia para ello. Muchas veces precalentamos hasta que aquello parece el infierno y, la verdad, para prácticamente ningún plato es necesario precalentar tanto.
Por supuesto, no uses la secadora
La secadora consume mucha luz y, además, destroza la ropa. Por lo tanto, siempre que sea posible, tiende la ropa al aire libre o utiliza un tendedero en el interior de la casa.
Tu ropa se secará bien (y, si está bien tendida, tendrás poco que planchar) y ahorrarás en la factura de la luz.
No centrifugues a máxima potencia
Con el centrifugado de la lavadora pasa como con la secadora: Destroza la ropa y consume luz. Así que, si puedes, utiliza un centrifugado más lento o, directamente, no lo utilices. Evidentemente, esto deja la ropa más mojada.
Debes plantearte si te interesa ese ahorro a cambio de esperar un poco más a que se seque la ropa.
Utiliza utensilios de cocina apropiados
Si vas a cocinar pasta para uno, no uses una olla para cuatro. Cuanto más grande la sartén o la olla, más cuesta calentarla.
Utiliza utensilios apropiados para la cantidad de comida que vas a hacer y tardarás menos a la vez que consumes menos luz (o gas, en caso de que tu cocina vaya a gas).
Cocina varios platos a la vez
Como sucedía con la plancha, la vitrocerámica gasta más en el momento de encenderse que una vez ya está funcionando. Así que, si te haces varios platos a la vez y los guardas en tuppers, estarás ahorrando electricidad.
Además, por supuesto, estarás ganando horas libres durante la semana.
Apaga luces
Esto es algo que tenemos todos los padres, que vamos apagando luces constantemente. Si no eres padre, quizá todavía no has desarrollado este TOC. Tendrás, pues, que hacer un esfuerzo.
Apaga las luces que no utilices, ¡que gastan luz!
Apaga los vampiros
Los vampiros energéticos son esas pequeñas lucecitas que tienen los diferentes electrodomésticos y utensilios electrónicos que tenemos por la casa y que consumen luz cuando creemos que están apagados.
Ya sabes, la típica lucecita roja de la tele cuando la apagas con el mando. Eso consume energía y, habitualmente, lo hace durante todo el día. Por tanto, apaga esos electrodomésticos completamente con el botón físico.
Lava en frío
La mayor parte de la energía que gasta la lavadora la gasta en calentar el agua, así que, si tu ropa lo permite, podrías probar a lavar en frío. De este modo, ahorrarás en luz (y muchas prendas de ropa –aunque no todas– te lo agradecerán).
Usa cargadores solares
Un truco poco conocido pero muy interesante. Normalmente, los cargadores y las baterías solares se usan sólo estando de viaje. Pero… ¿Por qué no usarlos también en casa y aprovechar la energía del sol?
Puedes dejarlo en la ventana para que se vaya cargando y cargar ahí el móvil. O puedes dejarlo en el coche mientras lo tienes aparcado y luego utilizarlo en casa. Hay mil formas y te aporta un ahorro interesante.
Además de, por supuesto, servirte si alguna vez te vas de viaje.
¿Puedes instalar placas solares?
Esto no está al alcance de todo el mundo, y, además, los temas regulatorios son bastante tocapelotas. Pero, dependiendo del caso, puede ser una decisión inteligente instalar placas solares.
Hace tiempo no salía a cuenta, pero, actualmente, sí. Y quizá no sea suficiente para todo el gasto energético que tienes día a día en casa. Pero, por poco que generes, es dinero que te ahorras en la factura de la luz.
Obviamente, hay que hacer una inversión inicial, pero, a largo plazo, supone un ahorro de lo más interesante.
Utiliza el lavavajillas
El lavavajillas consume muchísima menos agua que lavar a mano, aunque parezca lo contrario. Por lo tanto, utilízalo.
Eso sí, no lo pongas hasta que no esté al máximo de carga. Así ahorrarás todavía más (y pasarás menos tiempo al cabo de la semana colocando la vajilla en su sitio).
Utiliza una cisterna con doble descarga
Las cisternas de doble descarga permiten soltar más o menos agua según sea necesario. Seguro que ya conoces estas cisternas con dos botones.
Puedes comprarla en cualquier ferretería y tú mismo puedes instalarla. No tiene pérdida (y, además, existe YouTube).
Duchas rápidas mejor que largos baños
Esto es obvio, pero no por ello voy a dejar de ponerlo en la lista. Trata de evitar los baños y dúchate siempre que sea posible.
Y, si puede ser, que sean duchas cortas, no de las que duran media hora.
Agua fría
Ni por asomo me ducho yo con agua fría y quien intente convencerme de que lo haga igual se lleva una hostia. Pero yo no soy lonchafinista.
Si tú sí lo eres, quizá ducharte con agua fría sea la mejor forma de evitar que la ducha sea más larga de lo necesario.
Además, según dicen, ducharse con agua fría es muy bueno para la salud. Desde luego, no seré yo quien lo compruebe.
Usa aireador de agua
El aireador de agua es el cacharrito este que se pone en los grifos para que no salga el agua a chorro. De esta forma, sale menos agua y, en consecuencia, gastas menos agua.
Porque, normalmente, no necesitas tanta agua para lavarte las manos, cepillarte los dientes y demás.
Cierra grifos
Lógicamente, cuando no estés usando un grifo, ciérralo. Lo típico de que cuando te estás cepillando los dientes debes tener el grifo cerrado. De esta forma, ahorrarás varios litros de agua al mes.
La lavadora, siempre llena
Como sucedía con el lavavajillas, cuanto más llena esté la lavadora, menos lavadoras tendrás que poner, y, cuantas menos lavadoras pongas, menos agua y luz gastarás. Además, sólo tendrás que tender una vez y no varias (ganar tiempo también es ganar dinero).
Que no haya ni una fuga
Evidentemente, evita todas las fugas que haya en los grifos de la casa. Con las fugas, por pequeñas que sean, sucede como con los vampiros eléctricos: están funcionando durante todo el día. Así que, aunque parezca poco, la suma, al cabo del mes, es enorme.
Ten plantas autóctonas
Si tienes plantas, ya sea en el jardín, en el balcón o en las ventanas, vas a tener un sobregasto en agua.
Esto es así. la cuestión es que ese sobregasto puedes reducirlo si tienes plantas autóctonas, porque, al estar acostumbradas al clima, necesitan menos agua, porque el agua de la lluvia les suele bastar.
Agrupa las plantas según necesidad de agua
Si pones las plantas que necesitan más agua en la misma jardinera, no estarás malgastando agua. Una de las jardineras necesitará más agua, pero la otra necesitará menos.
En el caso de que las tengas mezcladas, ambas jardineras necesitarán la cantidad de agua que necesita la planta que más agua necesita.
No riegues en horas de sol
Si riegas en horas de sol, el sol calienta el agua y ésta se evapora. Es decir, pierdes agua y necesitas echar más. Por ello, deberías regar o bien antes de que amanezca o bien cuando ya ha caído el sol.
Recoge el agua de la lluvia
Si te es posible, recoge el agua de la lluvia. Esa agua no vale para prácticamente nada, pero el riego de las plantas es una excepción. Ahí sí se puede utilizar sin riesgos. Así que… ¿Por qué gastar si el cielo nos lo da gratis?
Aísla bien tu vivienda
Aislar la vivienda es la mejor forma de evitar gastar más calefacción de la necesaria en invierno y más aire acondicionado de la cuenta en verano. Además, te permite dormir mejor, porque, a menudo, no sólo consigues aislamiento térmico sino también acústico.
Lo más importante, en este sentido, es utilizar buenas ventanas. Si tu vivienda es vieja, probablemente este sea uno de los principales problemas que tiene. Deberías cambiar las ventanas por unas con buen aislamiento cuanto antes.
También puedes optar por utilizar aislantes en los dobles techos o en los huecos de las paredes (hay empresas especializadas en hacerlo), pero esto suele ser menos necesario que cambiar las ventanas.
Las persianas también cuentan
Las persianas permiten evitar que entre más sol de la cuenta en verano. Esto nos permitirá tener la casa más fresca y, en consecuencia, evitar un poco el uso del aire acondicionado.
Usa el termostato
El termostato es uno de los mejores inventos a la hora de ahorrar en las facturas de la luz y del gas. Apenas cuesta 30€ y te permite tener siempre la casa a una temperatura adecuada.
De esta forma, evitarás sobrecalentar, tener que abrir una ventana para tomar el aire, que se enfríe la casa, tener que volver a calentar, etc.
Esa forma irracional e ineficiente de utilizar la calefacción (o el aire acondicionado) suele conducir a gastar muchísimo dinero al cabo del mes.
Limita el uso de la calefacción y el aire acondicionado
Esto te lo permitirá el termostato. Pero, si no lo tienes, puedes ahorrar reduciendo el uso que haces de la calefacción y del aire acondicionado.
Incluso si tienes termostato, puedes ponerlo un grado o dos por debajo del nivel de confort óptimo y utilizar abrigo cuando sea invierno e ir en pelotas cuando sea verano.
Compra más mantas
Al hilo de lo anterior: la calefacción no es la única forma de protegerse del frío. Puedes utilizar mantas y, con ello, reducirás la cantidad de energía que gastas. Tu factura te lo agradecerá (además, las mantas dan un aspecto muy tierno).
Usa más el agua fría
Ya lo hemos dicho antes con el ejemplo de la ducha, pero puedes utilizar más el agua fría en general. También al lavar los platos o al lavarte la cara (en caso de que utilices agua caliente). Es un poco más incómodo, pero te ayudará a ahorrar.
Los ventiladores de techo, útiles todo el año
Los ventiladores de techo no son muy caros y son muy útiles… ¡Y no sólo en verano! En verano es evidente que hacen que circule más el aire y notes más fresquito. Pero en invierno también son útiles, porque resulta que el aire caliente sube más que el frío.
Al encender el ventilador de techo, por tanto, lo que hacemos es bajar ese aire caliente para que esté por toda la sala.
Usa alfombras
¿Nunca te has preguntado por qué los antiguos utilizaban tantas alfombras? Aparte de porque molan, la razón es que son un excelente aislante térmico. Las alfombras evitarán que suba el frío del suelo a la estancia.
Cierra puertas
Cuanto más compartimentes tu casa, más fácil será obtener una buena temperatura en cada una de las estancias. Así que, si vas a estar en el salón, no tengas la puerta del pasillo abierta. Cierra y notarás cómo se caldea el ambiente mucho más rápido.
No tapes los radiadores ni los uses para secar cosas
Los radiadores deben estar libres y despejados para dar el máximo calor. Por tanto, evita poner muebles por delante o ponerles cosas encima (como ropa húmeda que tenga que secarse pronto).
¿No puedes mudarte?
Por último, como en la sección anterior, plantéate si no es posible mudarte. Quizá puedas ir a una casa con más luz solar o con una mejor eficiencia energética. Es cuestión de mirar y no comprometerse con la casa en la que estás, especialmente si vives de alquiler.
🛒 Ahorro en consumibles
Vamos ahora con algunos consejos para ahorrar cuando vamos al supermercado:
Hazte un menú semanal
Lo primero que tienes que hacer si quieres ahorrar a la hora de hacer la compra, es hacer un menú semanal. Incluye ahí los snacks, aperitivos, bebidas y todo lo que lo acompaña, no te limites a los platos fuertes.
Así, con este menú semanal, podrás hacer la lista de la compra de forma rápida y eficaz (y sin añadir nada extra).
Haz trabajo de campo e investiga los diferentes supermercados
Una vez tengas los menús, pásate un día investigando en qué supermercados están más baratos los distintos ingredientes. La idea es que sepas qué comprar en cada sitio.
Evidentemente, si la diferencia es de céntimos y tienes que coger el coche para ir de uno al otro, no te compensa, pero, si están cerca, puedes aprovechar lo mejor de cada uno y ahorrar algo de dinero.
Haz una lista (con conocimiento) y no te salgas de ella
Con todo lo anterior, cada vez que tengas que ir a comprar puedes hacer una lista con qué hay que comprar y dónde tienes que hacerlo. Así te aseguras de comprar sólo lo necesario y, además, de hacerlo al mejor precio.
Ve al grano
No vayas al supermercado a pasear. Hay gente que se pasa una hora entera en esos antros dando vueltas con el carrito. Se les pasa la vida bajo esas luces fluorescentes.
Tú ve a lo que vas, rapidito y sin perder el tiempo. Así será menos probable que te distraigan los colorines y acabes comprando algo que no necesitabas.
Ve con el estómago lleno
La mejor forma de evitar comprar cosas que no necesitas es ir a comprar con el estómago lleno. Así, todas esas cosas tan apetecibles y sin las que no puedes vivir pasarán a ser cosas del montón que no te hacen falta.
Además, cuando tienes hambre los olores a comida te afectan más, así que, si pasas por delante de la charcutería o de la panadería, te entrarán ganas de comprar de forma inevitable.
Conócete y ponte impedimentos a ti mismo.
Ponte música al ir a comprar
Los supermercados están diseñados para que te despistes y acabes comprando más de lo necesario. No es casualidad que una rueda del carrito siempre se vaya de lado. Está pensado para que te cueste ir en línea recta y te vayas hacia las estanterías.
Si te pones música mientras compras, te meterás en tu mundo y será más difícil que estos trucos de marketing te afecten.
Aprovecha las marcas blancas
Las marcas blancas son el mejor invento de la humanidad.
Y, sí, los antibióticos también están bien.
Lo reconozco.
Pero las marcas blancas nos permiten ahorrar un buen dinero sin por ello sacrificar calidad. Y si compras, por ejemplo, en Mercadona, tienes una marca blanca que se ha convertido en una de referencia por su calidad.
Así que no te dejes convencer por las marcas.
Compra productos próximos a su fecha de caducidad
En muchos supermercados (no todos), los productos que están cercanos a su fecha de caducidad están rebajados de precio. Si los vas a consumir pronto (o si puedes congelarlos) puedes comprarlos con un descuento y ahorrarte un buen dinero.
Compra en gran cantidad con descuento
En ocasiones hay descuentos muy interesantes que son 2×1 o 3×2 o semejantes. En el caso de los productos no perecederos, como el arroz, los garbanzos, las lentejas o tantos otros, comprarlos en grandes cantidades cuando hay este tipo de ofertas puede ser una idea inteligente.
Otra opción es comprar a granel directamente. En lugar de acudir a comprar este tipo de productos al supermercado, puedes buscar por Internet algún distribuidor de mayor tamaño y en vez de comprar uno o dos kilos, comprar veinte o treinta.
Suena loco, lo sé. Pero son productos que no se ponen malos y que vas a ir consumiendo. Si tienes espacio en casa… ¿Por qué no comprarlos así y ahorrarte un dinero?
Fíjate en el precio por kilo
Siempre que vayas a comprar, ignora el precio que aparece en grande en las etiquetas. Fíjate en el “precio por kilo”. Todos los supermercados están obligados a poner esta información, así que no hay excusa.
Si te fijas sólo en el precio grande, igual crees estar ahorrando por comprar el queso rayado de 1,5€ cuando, en realidad, el de 2,5€ trae el doble de cantidad.
Si te fijas en el precio por kilo, esto no te pasa.
Lleva las bolsas de casa
Las bolsas cuestan un dinero y, además, están pensadas para que no puedan llevar una gran cantidad de peso (de forma que tengas que comprar más bolsas). Por no hablar, obviamente, de lo que contaminan.
En lugar de eso, llévate las bolsas de casa. En el Mercadona venden unas en las cajas que valen creo que 10 o 20 céntimos y que aguantan mucho peso y duran años. Compra unas pocas y tenlas en casa para cuando vayas a comprar.
No compres agua
Lo mejor es beber agua del grifo. Y, sí, lo sé, en algunas zonas (dependiendo del tipo de suelo que haya, es un tema largo y aburrido) el agua es mala. En ese caso, instala un filtro en el grifo.
No te asustes. No son caros. Por menos de 40 puedes tener uno. Este, por ejemplo.
Nada de ultraprocesados
Los productos ultraprocesados son malísimos para la salud, pero es que, además, son más caros (lógicamente, esos “procesos” cuestan dinero, y es dinero que acabas pagando tú). Compra menos procesados y procesa más tú en tu casa. Comerás mejor y más barato.
Ni se te ocurra tirar comida
Hay muchos niños que se mueren de hambre en África. Y, sí, ambos sabemos que tires o no tires eso que te ha sobrado de la cena, esos niños no van a comer.
Pero, bueno, si no te convence lo de los niños, recuerda que tirar comida es tirar dinero. Guárdalo para el día siguiente.
Aprovecha los descuentos
Evidentemente, no compres cualquier cosa con descuento. Pero, recuerda, tienes hecha una lista de ingredientes que compras habitualmente y que necesitas para tus menús. Si ves que alguno de esos alimentos está con descuento, compra más de lo habitual (si puedes almacenarlo sin que caduque).
Aprovecha los programas de fidelización
Algunos supermercados tienen sistemas de fidelización, tarjetas de puntos, etc. Te voy a ser sincero: no tengo mucha idea de cómo funcionan. Pero sé que existen y entiendo que permiten obtener descuentos. Deberías aprovecharlos.
Compra de temporada
La fruta de temporada es mucho más barata que la que no es de temporada, porque ésta necesita o bien sistemas extra (invernaderos, sistemas de calefacción, riegos especiales… en fin, mil cosas) o bien traerla desde la otra punta del mundo.
Y, claro, esas cosas encarecen.
Compra la fruta de temporada y estarás mejor alimentado, más sano, comerás fruta más variada y, además, ahorrarás dinero.
Valora comprar online
Para la mayoría de los lonchafinistas hacer la compra online no compensa. Pero hay casos en los que el lonchafinista sí puede encontrar un valor en hacer la compra online. Por ejemplo, si vives lejos del supermercado y tienes que coger el coche.
Quizá te salga más barato pagar los gastos de envío que lo que gastas en gasolina. O quizá la diferencia sea tan pequeña que te compense el ahorro en tiempo, aunque tengas que pagar, en el cálculo final, un par de euros de más.
Usa el congelador y la despensa
Ya hemos hablado de comprar productos no perecederos a granel. Puedes hacer lo mismo con la carne y el pescado si encuentras buenas ofertas y aprovechar al máximo el congelador. Así, podrás aprovechar los descuentos y no tendrás que ir tantas veces a comprar.
Ve pocas veces al supermercado
Al hilo de lo anterior, intenta comprar de una sola vez cuanto más, mejor. Evidentemente, calculando fechas de caducidad y demás para que no se te pase ningún producto.
Pero ir al supermercado, además de ser aburrido y una pérdida de tiempo, supone el riesgo de comprar cosas que no necesitas. Así que… Basta con reducir el número de veces que vas al supermercado para reducir el riesgo de comprar cosas que no necesitas.
Fácil, ¿verdad?
Presta atención al pequeño comercio
El pequeño comercio no siempre es más barato, pero a veces, sí. Pásate por ahí de vez en cuando a ver si ves algo que te resulte interesante y esté a buen precio. Algunos pequeños comercios traen mercancía propia a precios más bajos. Aprovéchalo.
¿No hay algún agricultor cerca?
Si vives en el centro de Madrid, esto no te va a resultar fácil. Pero, si vives en un pueblo algo más pequeño, quizá haya algún agricultor con el que puedas llegar a un trato para comprar fruta y verdura más barata. No pierdes nada por probar.
Quítate los vicios
No seré yo quien recomiende quitarse la cerveza. Pero.
Si eres lonchafinista, supongo que entiendes que hay que hacer sacrificios. Quítate esos chocolates, esos bombones, esos refrescos, etc. Todo son vicios. Sin ellos, estarás más sano y, además, ahorrarás dinero.
No lleves a los críos a comprar contigo
Los críos son máquinas de pedir, así que, si puedes, no los lleves de compras contigo. Si cumples con el consejo mencionado antes de ir las menos veces posibles al supermercado, esto te resultará más fácil.
💳 Ahorro en otras compras
Ahora vamos con algunos consejos para otras compras, sean del tipo que sean (menos los consumibles, que ya los hemos visto):
Compara en diferentes tiendas
Antes de hacer cualquier compra, compara. Esto es básico y no todo el mundo lo hace. Van a la tienda de confianza y pagan el precio que les piden. No caigas en este error. Ve a varias, compara, pregunta por qué en un sitio es más barato, negocia, etc.
Compara online y offline (también en diferentes tiendas)
Por supuesto, compara también online. Y compara entre diferentes tiendas online. Actualmente pensamos que Amazon tiene siempre los mejores precios, pero, la verdad, esto rara vez es así. Incluso hay tiendas físicas con precios más bajos.
Por tanto, compara, compara y compara. Es la única forma de encontrar el mejor precio.
Monitoriza precios
No está nada mal utilizar alguna herramienta para monitorizar precios de las tiendas online para ver si los descuentos que nos ofrecen son, realmente, descuentos.
En Black Friday se ve mucho que los vendedores ponen un precio rebajado, pero es que durante las semanas previas han ido subiendo el precio una barbaridad.
No te dejes engañar por los falsos descuentos.
Aprovecha las fiestas para que te lo regalen
Si está cerca la fecha de tu cumpleaños, de tu santo o de Navidad, no te compres eso que estás necesitando. Simplemente, espera unas semanas y pídele a alguno de tus conocidos o familiares que te regalen lo que necesitas.
Tú te ahorras ese dinero y a ellos les quitas de encima el marrón de no saber qué regalarte. Win-win.
Utiliza Wallapop
Wallapop está repleto de productos que no han salido de su caja y que se venden por una fracción de lo que cuestan realmente. Aprovéchalo. Puedes encontrar auténticas ganas y, si eres buen negociador, puedes incluso conseguir descuentos adicionales.
No compres libros
Tener una buena biblioteca es algo que mola, no nos vamos a engañar. Pero si estás en fase lonchafinista, no puedes perder el dinero comprando libros. Tienes bibliotecas y webs con libros en abierto. No necesitas poseer el libro para poseer su conocimiento.
Compra fuera de temporada
Al contrario que con la fruta, los objetos es mejor comprarlos fuera de temporada. Si tienes que comprar un aire acondicionado, hazlo en invierno. Si tienes que comprar una estufa, hazlo en verano.
Así ahorrarás y echarás una mano a los negocios que te lo vendan (que, fuera de temporada, suelen pasarlo mal por la falta de flujo de caja).
Vende lo que no uses
Ya hemos dicho que puedes comprar cosas en Wallapop. También puedes venderlas. Seguro que tienes muchas cosas que has comprado a lo largo del tiempo y que ya no usas (no digamos ya si tienes niños pequeños).
Aprovecha para hacer limpieza y sacar un buen dinero.
Remiendos y arreglos
Vivimos en una época muy consumista y ya no nos acordamos de cómo era coger hilo y aguja. Pero, si volvemos a ello, descubriremos que las prendas duran mucho más tiempo del que pensábamos.
Lo mismo sucede con los utensilios, los electrodomésticos, los distintos productos de electrónica… Muchas veces se pueden arreglar. Y, además, hacerlo puede ser divertido y te puede dejar un buen aprendizaje.
¿Por qué no intentarlo?
Utiliza los zapateros
No los muebles. Los zapateros del dicho “zapatero, a tus zapatos”. Siguen existiendo y pueden hacer que tus zapatos duren el doble de tiempo, además de acomodártelos para que se ajusten mejor a tu pie y, en consecuencia, andes mejor.
Invierte en calidad
Cuando se trata de comprar productos (ropa, electrodomésticos, productos de electrónica, juguetes…) lo mejor es invertir en calidad. Nos durarán mucho más tiempo y, a largo plazo, ahorraremos dinero. Es tentador comprar lo barato, pero, como dice el dicho, suele acabar saliendo caro.
Utiliza una máquina eléctrica de afeitar
Evitar el uso de maquinillas desechables y utilizar una máquina eléctrica o una manual pero reutilizable es una buena forma de ahorrar. En general, todo lo que sea reutilizar y evitar consumibles, es bienvenido.
Utiliza la copa menstrual
En el caso de las mujeres, la copa menstrual es una buena alternativa a los tampones y las compresas. No es para todas (hasta donde yo sé), pero ahí está.
Utiliza pañuelos de tela
Otro ejemplo de evitar el uso de consumibles son los pañuelos de tela. Así podremos dejar de utilizar kleenex. Aunque también puedes usar las mangas de la chaqueta, si quieres.
Aprovecha la financiación sin intereses
En algunas tiendas, especialmente online, existe la posibilidad de financiar una compra sin intereses. Es una buena forma de fragmentar el pago de compras de gran tamaño sin un sobrecoste.
Eso sí, asegúrate de que vas a hacer frente a las cuotas, porque, en caso de impago de alguna de ellas, sí que pueden darte un buen palo.
Negocia
Hemos perdido un poco la sana costumbre de negociar. La mayoría de las tiendas tienen margen suficiente para ofrecer un descuento, así que podemos intentarlo. Si no lo logramos, pues pagamos lo que sea. Pero si conseguimos una rebaja… Bueno es.
Además, al hacerlo, estaremos practicando una habilidad que nos vendrá muy bien en los negocios.
🎓 Ahorro en la formación
Ya sabes que, si tienes poco dinero, mi consejo es que inviertas fuerte en formación. Pero, incluso aquí, tienes opciones para ahorrar:
Recursos gratuitos
En primer lugar, tienes miles de recursos gratuitos en internet. YouTube, Wikipedia, blogs… Tienes de todo. Si quieres aprender sobre un tema, sólo tienes que googlear “curso gratis de X” o “mejores blogs de X”.
Quizá ahí no esté la mejor formación del mundo, pero será más que suficiente para empezar y formarte un mapa general del tema. Luego ya, sabiendo qué necesitas, podrás ir a por algo de mayor calidad.
Si no te formas primero una idea general, no sabrás diferenciar un buen curso de uno malo.
Twitter es una red social llena de odio, cachondeo, drama y lo que te apetezca. Tú eliges a quien sigues y qué sacas de esta red. Si sigues a gente que sabe de un tema, aprenderás de ese tema. Esto es así de fácil.
Los que se quejan de Twitter es porque lo usan mal. Si metes basura, sale basura. Ahora, si metes oro, sale oro. Además, puedes hacerte diferentes listas temáticas para focalizar mejor en lo que quieras aprender en cada momento.
Aprovecha BlackFriday
Durante BlackFriday la mayoría de academias online y webs de cursos ofrecen generosos descuentos. Y, teniendo en cuenta que Black Friday es en noviembre, podría ser una buena idea aprovechar ese momento para empezar un “curso académico”.
Compra la suscripción anual
En la mayoría de webs de cursos y academias digitales las suscripciones pueden ser mensuales o anuales. Si compras la anual, generalmente te ahorras un par de meses. Y si, además, la compras en BlackFriday, aún consigues mayor descuento.
Es buena idea hacerlo si de verdad estás dispuesto a estudiar.
Ojo. Esto hazlo sólo si sabes lo que estás comprando (por eso dije que, antes, busques información gratuita para orientarte y poder identificar los cursos de calidad). Si no es así, compra sólo un mes para ver qué tal y ya luego, si eso, compras la suscripción anual.
Ayudas
Existen varios tipos de ayudas para gente que se está formando. Especialmente en el caso de las carreras universitarias, pero también de los cursos de formación e, incluso, para formación “ajena” a las vías estatales habituales. Puedes revisar a ver qué encuentras.
Becas
No sólo las que ofrece el Estado. También hay organizaciones y fundaciones que dan becas. Además, muchas academias online y webs de cursos ofrecen becas para personas con situación económica delicada o que demuestren que tienen talento para el curso que van a hacer.
Cursos de formación
Por último, tienes los cursos de formación del SEPE (anterior INEM). Son gratis o muy baratos y, además, a veces tienen prácticas que permiten cobrar un dinero mientras aprendes. Si estás en paro, son una buena opción.
🚗 Ahorro en transporte
Ahora, echemos un vistazo al ahorro en transporte, que también se va un buen dinero en esa partida de gasto.
Utiliza más el transporte público
Este es el primer consejo. El transporte público, y más en las ciudades, está muy bien. Es rápido, razonablemente barato, te da alguna que otra experiencia interesante, no tienes que perder tiempo aparcando… Vale la pena. Y, generalmente, sale más a cuenta que coger el coche.
Utiliza bonos transporte
Si estás acostumbrado a utilizar el transporte público (o piensas empezar a hacerlo) puede ser buena idea comprar un bono transporte. Cada Comunidad Autónoma tiene los suyos, pero, básicamente, son bonos por un número de viajes o con viajes ilimitados durante un período de tiempo.
Elige el que más se ajuste a tus necesidades y tendrás un descuento de lo más interesante en lo que a transporte se refiere. Si pasas de ir en coche a usar un bono transporte, te aseguro que sale muy a cuenta.
Y, además, puedes leer en el metro, bus o tren (ya que siempre dices que te gustaría leer más pero que no sacas tiempo).
Compra una bicicleta
Otra muy buena opción es comprar una bicicleta. Para ir a hacer algunas compras rápidas o desplazarte a lugares cercanos, sin duda es de las mejores formas de moverse. No gastas, no contaminas, haces ejercicio… Todo ventajas.
Conduce más eficientemente
En el caso de que tengas que coger el coche sí o sí, conduce de forma eficiente. Si vas a fondo todo el rato o con frenazos y acelerones vas a gastar muchísimo más que si conduces a una velocidad moderada y con el motor a pocas revoluciones.
La diferencia puede ser de varias decenas de euros a final de mes.
Si compras un coche, que sea de segunda mano
Comprar un coche nuevo es la peor inversión que se puede hacer. Tal y como lo sacas del concesionario, vale la mitad. Para eso, busca al tonto que acabe de sacar el coche del concesionario y tenga que venderlo. Te ahorrarás la mitad del dinero.
Eso sí, conviene tener algún amigo con algo de idea de coches y mecánica para que pueda echar un vistazo y comprobar si el coche, aunque sea de segunda mano, está bien.
Investiga las gasolineras a varios kilómetros a la redonda
Esto lo hace la mayoría de la gente, pero no voy a quedarme sin comentarlo. Deberías buscar la gasolinera más barata, y no únicamente de las cercanas, sino de las que hay a varios kilómetros a la redonda (porque, si el precio es suficientemente bajo, compensa el desplazamiento).
Por supuesto, si trabajas a 50 kilómetros y por el camino hay alguna gasolinera aún más barata, pues es esa la que deberías utilizar para repostar más habitualmente.
No te centres sólo en el precio, también en la fidelización
Muchas gasolineras tienen precios algo más altos pero buenos sistemas de fidelización, que dan descuentos interesantes y regalos. Debes calcular si los descuentos que obtendrás por esa fidelización compensan o no los bajos precios de las otras gasolineras para poder elegir lo más barato.
Aprende algo de mecánica (o échate un amigo mecánico)
Las averías de los coches suponen la mayor parte del coste de tener uno. Y la mayor parte del precio de cualquier reparación es el tiempo del mecánico, no las piezas.
Es por ello que, si se cuenta con un amigo mecánico o tú mismo sabes algo de mecánica, podrás ahorrar una buena cantidad de dinero.
¿De verdad tu coche es imprescindible?
Este es un punto importante. Después de todo lo anterior, quizá concluyas que tu coche no es necesario. Tienes transporte público, cuando necesitas un coche puntual puedes alquilarlo… ¿De verdad compensa asumir todos esos costes anuales?
Quizá la mejor opción sea vender el coche.
Alquila tu coche cuando no lo uses
En el caso de que no sea así, debes saber que tu coche se puede alquilar durante las horas en que no lo utilices. Es algo que a pocos hombres nos gusta hacer, pero, oye, si estás en el estado mental lonchafinista, puede ser una buena opción para compensar los costes que tiene el coche.
Alquila tu plaza de aparcamiento cuando no la uses
Si tienes una plaza de aparcamiento también la puedes alquilar cuando no la estés utilizando. Total, si se pasa 9 o 10 horas sin utilizar, puedes buscar a alguien que la necesite a esas horas y alquilársela. Ambos salís ganando.
El coche eléctrico es más barato
Esto es una realidad. A largo plazo, un coche eléctrico sale más barato. Llenar el depósito de un coche de gasolina cuesta unos 60€, mientras que una carga equivalente de un vehículo eléctrico cuesta entre 10 y 20€. Y eso que en España la luz no es precisamente barata.
Por eso, a lo largo de los 10 o 15 años que te puede durar el coche (como poco), el ahorro en repostar compensa enormemente el extra de inversión que suponga la compra del coche eléctrico.
Eso sin contar las ayudas que se dan a los coches eléctricos con todas las historias de ayudas verdes que hay.
📜 Ahorro en seguros
Toca echar un vistazo al ahorro en seguros, que también es posible:
Usa comparadores
Los comparadores están por todas partes y los hay para prácticamente cualquier cosa. Pero lo cierto es que nacieron para comparar seguros. Y siguen funcionando muy bien. Los comparadores te darán las mejores ofertas para tu caso particular.
Y, a veces, te enseñarán compañías que ni siquiera sabías que existían.
Úsalos.
Considera las franquicias y los copagos
Las franquicias y los copagos responsabilizan al tomador del seguro de pagar una parte de los costes asociados en caso de que el seguro tenga que entrar en juego. Esto supone un ahorro en la póliza del seguro.
Si puedes ahorrar un dinero para que, en caso de accidente, puedas hacer frente al copago, puede ser una buena opción para pagar menos dinero en seguros.
Paga con tarjeta
No me preguntes por qué, pero muchas compañías de seguros ofrecen descuentos al pagar con tarjeta. Siendo así… ¿Por qué no hacerlo?
Aprovecha tu tarjeta
Las tarjetas de crédito, muy a menudo, tienen seguros integrados. Entérate de cuáles tienes disponibles en tu tarjeta de crédito y ahórrate tener seguros duplicados.
Evita los pagos fraccionados
Los seguros se pueden pagar en varios pagos al cabo del año o en un pago único. Es mejor el pago único, porque los pagos fraccionados suponen costes para la aseguradora y los acaba repercutiendo al cliente.
Agrupa seguros
Salvo que quieras unas prestaciones y coberturas muy particulares, lo cierto es que los seguros generalistas son tan buenos como los particulares. Si agrupas tus seguros en una aseguradora generalista, podrás obtener un ahorro suculento.
Conoce bien qué necesitas y en qué ya estás cubierto para evitar coberturas innecesarias
Por ejemplo, si tienes un seguro de coche, pero tu coche es nuevo, es probable que el fabricante te haya aportado una garantía que incluya una asistencia en carretera. En ese caso, puedes pedir al seguro de coche que quiten esa cobertura y ahorrar algo de dinero.
Si cambias de seguro, asegúrate de darte de baja bien
Para darse de baja de una aseguradora hay que seguir ciertos pasos, no basta con devolver los recibos. Hay unos plazos establecidos por ley en los que debes avisar, etc.
Asegúrate de que te has dado de baja del anterior seguro antes de contratar el nuevo o pagarás dos veces.
🍽️ Ahorro en comidas y cenas
Vamos ahora con el ahorro en las salidas a comer y a cenar:
Desayuna en casa
El café por las mañanas en el bar está bien para socializar, pero lo cierto es que te acaba suponiendo entre 30 y 60 euros al cabo del mes. ¡Muy cara me parece esa socialización! Y más teniendo en cuenta que ninguno de esos del bar te ayudaría en una mudanza.
La cerveza tras el trabajo, también en casa
Lo mismo sucede con la cerveza en el bar tras el trabajo. Es mejor que te la tomes en casa. Más aburrido, pero mucho más barato. Si cambias este y el hábito anterior, es fácil que, al cabo del mes, estés ahorrando entre 50 y 100€ más.
Es más barato comer que cenar
Si quieres llenar el estómago fuera de casa con amigos o tu novia, lo mejor que puedes hacer es ir a comer. Generalmente, sale más barato que ir a cenar.
Una copa de vino al día NO es buena
Que el vino sea bueno para la salud en bajas cantidades es un mito.
Que nos da igual, a ver, el vino está bueno.
Pero no es bueno. Además, vale dinero.
Si cambias el vino por agua, mejorarás tu salud y, a la vez, ahorrarás.
Busca ofertas y cupones descuento
Internet está repleto de ofertas y cupones descuento en muchos restaurantes y bares. Y, ahora, con la pandemia, muchos más restaurantes se suman a estos sistemas. Puedes buscar antes de elegir a qué restaurante ir y ahorrar algo de dinero.
La comida a domicilio tiene el mismo precio…
Comprar comida a domicilio puede ser un gran error. Si te acostumbras a hacerlo una vez por semana, te encontrarás con que te gastas 20 o 30€ por semana en comer en casa (eso sí, comida más rica).
…Pero sólo compras comida
Ahora bien, es cierto que, al comprar comida a domicilio, sólo compras la comida, no la bebida, el aperitivo, el café… Así que, si queréis comer algún día de restaurante, podéis plantearos hacerlo en casa y pedir a domicilio. Os podéis ahorrar otros 10 o 15 euros por cabeza.
Invita a comer en casa
No hay por qué comer fuera. Puedes invitar a tus amigos o a tu novia a comer en casa. Es más barato, igual de divertido (o más) y, demás, eso te ayudará a mejorar tus habilidades culinarias.
Utiliza plataformas de opinión
Las plataformas de opinión te pueden servir para saber en qué restaurantes ponen bastante comida y en cuáles no. Así, quizá, uno que, aparentemente era más caro, acaba siendo más barato, porque ponen más cantidad de comida.
Además, te servirá para conocer restaurantes nuevos y buenos y para ir relativamente sobre seguro.
Utiliza Too Good To Go
Too Good To Go es una aplicación que te permite comprar comida muy barata de restaurantes a los que les ha sobrado algo de comida. Si vives en una gran ciudad, está muy bien. Es muy barato y comes como un marajá.
También lo puedes usar para comprar packs de fruta y verdura (entre otros) en los supermercados.
🎨 Ahorro en cultura
Ahora, formas de ahorrar en cultura y entretenimiento:
Utiliza webs de cupones y ofertas
Existen multitud de webs que ofrecen cupones y ofertas para conciertos, fiestas, exposiciones y demás. Si los utilizas, no sólo podrás ahorrar, sino que descubrirás muchos eventos que ni siquiera sabías que existían (¡y eso que están en tu propia ciudad!).
Aprovecha los museos gratuitos
Existe una vasta red de museos por España y muchos de ellos son gratuitos. Si quieres pasar un día haciendo algo diferente, puedes mirar cuáles hay en tu ciudad e ir a verlos. Pasarás un buen día, te culturizarás y no te costará ni un duro.
Aprovecha los eventos gratuitos
También hay eventos gratuitos de todo tipo, organizados por ayuntamientos o por entidades privadas. Por ejemplo, a veces hacen cinefórums o conferencias a las que se puede asistir gratuitamente. También son una opción.
Utiliza plataformas de opinión
Las plataformas de opinión te servirán para saber la calidad de ciertos eventos, pero, además, tienen algo interesante para el tema del ahorro: si esos eventos tienen algún día con precios rebajados o gratuitos, lo encontrarás en los comentarios.
Aprovecha el día del espectador
Si te gusta el cine, tienes la opción de ir el día del espectador. No tengo claro si es el mismo día para toda España, así que no voy a decir el día para no meter la pata. Pero siempre hay un día del espectador en el que la entrada es mucho más barata.
Lleva tu propia comida al cine
En muchos cines intentan que no pases si llevas comida de fuera y te obligan a comprar la comida en el propio cine. Pues bien, esto es ilegal, así que, si lo intentan, insiste. No pueden dejarte fuera. Y el ahorro que consigues es considerable.
No te pongas límites: ¿nunca has ido a una casa okupa?
Hay dos tipos de casas okupas: las que están llenas de yonkis y las que están llenas de yonkis que organizan cosas. A veces son conciertos, a veces son exposiciones, a veces son talleres… Interésate por las casas okupa de tu ciudad. Quizá encuentres alguna que haga cosas interesantes (y muy baratas o gratis).
La ópera y la música clásica no son TAN caras como crees
Muchas veces no vamos a la ópera o a conciertos de música clásica porque tenemos la idea de que es carísimo. Y es cierto que las mejores zonas son caras, pero hay otras que son muy accesibles. Podrías probar.
Y, además, puedes colarte en mejores sitios
Existe un truco muy interesante en la ópera y la música clásica que es coger una entrada barata de las del palco, y, desde ahí arriba, ver si hay asientos libres en la platea. Si es así, a medias del concierto puedes bajar y sentarte allí y disfrutar la obra como si hubieses pagado una entrada de 200€.
💪 Ahorro en deporte
El deporte es importante, ¿no crees? Aquí van unos consejos para que ahorres mientras te pones en forma:
¿De verdad vas al gimnasio?
La primera pregunta es obligada: ¿de verdad vas al gimnasio? Porque quizá estás pagando una suscripción al gimnasio para ir sólo una vez por semana. En ese caso, lo mejor que puedes hacer es darte de baja.
Si vas, todo bien. Es un lugar que te ayuda a estar más sano y donde socializas. Pero, si no vas, date de baja y deja de engañarte a ti mismo.
Ejercicios en casa
Si la parte de la socialización te da igual porque eres un forever alone, debes saber que puedes hacer prácticamente los mismos ejercicios en casa que en el gimnasio. Puedes comprarte unas pesas y unas bandas elásticas y trabajar los mismos músculos sin gastarte más dinero del necesario.
Haz más senderismo y running
Para completar el ejercicio que hacías en el gimnasio, puedes ir más a caminar y a correr. Tiene la ventaja de que es completamente gratis y muy saludable (de nuevo, es lo que me han contado, yo no lo sé).
🧳 Ahorro en viajes
Viajar es en sí mismo un gasto que se puede suprimir por entero. Pero, hoy en día, a la gente le gusta mucho viajar. Así que vamos a considerar que no es un gasto suprimible y vamos a dar algunos consejos para ahorrar en tus viajes:
Utiliza webs de cupones y ofertas
Como en el caso de la comida o del ocio, también puedes buscar webs de cupones y ofertas tanto para encontrar vuelos baratos como alojamientos a buen precio.
Utiliza comparadores
Los comparadores también son una muy buena opción. Te permitirán encontrar los mejores precios para los vuelos o para alquilar un coche, por ejemplo. El ahorro que puedes conseguir utilizándolos es enorme.
Compara diferentes formas de alojamiento
No te quedes con el típico hotel que se te viene a la mente en un primer momento. Piensa en los apartamentos, apartahoteles, hostales, Airbnb… Hoy en día tienes muchísimas opciones. Compara y encontrarás perlas ocultas.
Compara diferentes formas de transporte
Del mismo modo, compara formas de transporte. Tanto en el momento de hacer el viaje (avión, tren, autobús, coche…) como en el momento de moverte por allí (a pie, en bici, en coche, en transporte público…). Planifica bien este punto y ahorrarás mucho dinero.
Si alquilas coche, usa Rentalcover como seguro
Cuando alquilas un coche, te ponen un seguro que puede ser a todo riesgo y que siempre, siempre, invariablemente, es carísimo. Rentalcover, por su parte, es muy barato. Mi consejo es elegir el coche que quieras con la compañía de alquiler, que no aceptes su seguro, y lo asegures con Rentalcover.
Compra y cocina en casa
Si vas a un apartahotel o un apartamento, tienes la ventaja de que puedes cocinar en casa. Obviamente, algún día tendrás que comer fuera para probar la gastronomía del lugar. Pero… ¿Cada día y cada noche? Cocinar donde te alojas es una buena idea.
Lleva el equipaje imprescindible
Cuanto más equipaje, más facturación. Lleva lo mínimo imprescindible y ahorrarás dinero (además de ir más cómodo y tener menos riesgo de perder cosas).
Haz coachsurfing
El coachsurfing estaba más de moda hace unos años que ahora, pero sigue funcionando. Consiste en ir a casa de alguien que te presta su sofá a cambio de algo (que le friegues los platos, una buena conversación… lo que sea). Sobre todo si eres joven, es una muy buena opción.
Planifica (bien) tu viaje
Planifica bien tu viaje y ahorrarás una enorme cantidad de dinero. Saber de antemano a dónde vas, cómo es la mejor forma de ir, por qué comer en este sitio y no en este otro, qué cosas estarán abiertas y cuáles no, etc. es la mejor forma de no gastar más dinero del necesario.
Si tienes tarjeta de crédito, tienes seguro de viaje
La mayoría de las tarjetas de crédito llevan incluido un seguro de viaje. Comprueba si es tu caso y cuáles son las coberturas y quizá te ahorres contratar un seguro para tu viaje.
Olvídate de las temporadas altas
Si es temporada alta, simplemente, no viajes. Es el mejor consejo que se te puede dar. Ve cuando menos gente hay y no sólo ahorrarás, sino que disfrutarás más del viaje.
Evita las zonas turísticas (al menos, a la hora de comer)
Evidentemente, si vas a Roma, tendrás que ver el Coliseo. Pero no comas por allí cerca, porque te van a clavar y, además, vas a comer fatal. A la hora de consumir, vete a zonas poco turísticas para comer mejor y a mejor precio.
Cuida tu guía de viaje y véndela al terminar
Mucha gente compra una guía de viaje que igual le cuesta 20 o 30 euros y, al acabar el viaje, la tira a la basura. ¡No, hombre, no! Cuídala y, ya en el aeropuerto, cuando vayas a volver, ofrécesela a alguien que acabe de llegar.
Puedes recuperar 10 o 15 euros, pero, aunque no recuperes nada y simplemente la regales, también está bien. ¡Hay que ser mejor persona!
Haz el cambio de divisa antes de ir para allá (o infórmate bien)
En el cambio de divisa hay cada mamoneo que no veas. Como te pongas a sacar dinero en el cajero de un país con una divisa diferente, te van a sangrar en comisiones. Así que haz el cambio en tu país (si puedes) o, al menos, infórmate de cuál es la forma más barata de hacerlo una vez estés allí.
¿Alguna vez has hecho voluntariado?
Una última forma de viajar muy interesante es hacer voluntariado. El voluntariado no es gratis, pero sí es verdad que te ofrecen precios muy rebajados. Y, además, estás ayudando a otras personas en lugares exóticos. Si eres joven, puede ser una buena aventura.
💰 Ahorro financiero
Ahora vamos con el ahorro financiero. Como puedes imaginar, tratándose de bancos, aquí hay mucho robo que tenemos que evitar.
Vamos allá.
Deja de pagar comisiones por tu cuenta
Hoy en día hay muchos bancos que no te cobran comisiones continuamente por cualquier cosa y que no por ello te ofrecen peores condiciones (de hecho, al revés). Pásate a uno de esos bancos si todavía no lo has hecho. Yo uso ING.
Deja de pagar por tu tarjeta
Lo mismo que en el caso anterior. Hay bancos que te clavan comisiones de todo tipo por cualquier razón en relación a la tarjeta. De nuevo, en ING no te cobran comisiones por la tarjeta.
Si ya te la han cobrado, negocia y amenaza
Puesto que las comisiones son inexistentes en otros bancos, si te han cobrado alguna comisión en tu banco, exige que te devuelvan el dinero y amenaza con irte a otro banco. Quizá no funcione, pero quién sabe. Y, si no funciona, cumple tu amenaza y vete a un banco que no te sangre.
Invierte donde menos comisión te cobren
Ya en materia de inversión, si no eres un inversor experto, te aconsejo invertir donde menos comisión te cobren. Es decir, en fondos indexados y ETFs (eso sí, recuerda que, si eres lonchafinista, probablemente la mejor inversión sea en formación para mejorar tus ingresos).
Pospón el pago de impuestos
Los planes de pensiones no son muy populares, pero no necesariamente tienen que ser malos. Hay gestoras independientes que tienen prácticamente lo mismo que en los fondos de inversión en sus planes de pensiones.
Si ya estás invirtiendo con ellos, ¿por qué no hacerlo en sus planes de pensiones y posponer el pago de algunos impuestos?
Si te endeudas, atiende al total a pagar
Al contraer una deuda, no tienes que fijarte únicamente en el tiempo que vas a estar pagando, sino también en el total que tendrás que pagar. Así sabrás cuán caro te sale endeudarte a largo plazo.
Si te endeudas, hazlo a tipo fijo (al menos, hoy por hoy)
Hoy en día, endeudarse a tipo fijo es la mejor opción. Es poco probable que los tipos de interés bajen más, pero sí es probable que suban. Así que mejor pagar un poco más durante 2 o 5 años a cambio de la seguridad de que, dentro de 10, no se nos va a disparar el coste de la deuda.
Si te endeudas, compara condiciones
Como en cualquier otro caso, debes comparar condiciones. Y más cuando la deuda es grande. Busca aquellos bancos y aquellos planes de financiación que te ofrecen mejor precio y mejores condiciones.
No te endeudes
Dicho todo lo anterior, mi consejo es que no te endeudes. Yo tengo una hipoteca, y no me gusta tenerla. Deber dinero te pone en una situación de fragilidad, por muy bien que te vayan las cosas y por pequeña que sea la deuda.
En la medida de lo posible, evítalo.
Destina tus ahorros a reducir deuda…
Si te has endeudado, la mayoría del dinero que ahorres debería ir a reducir la deuda. Quizá no todo (mejor tener un colchoncito para salvar imprevistos y no tener que endeudarte aún más), pero tu prioridad debería ser quitarte de encima la deuda.
…Salvo por motivos fiscales
Ahora bien, hay algunas deudas que se bonifican fiscalmente. En ese caso, puede que te compense mantener la deuda. Eso sí, tenla siempre en niveles controlables.
¿Autónomo? Utiliza un gestor online…
Si eres un autónomo normal y corriente y no tienes que hacer grandes estructuras fiscales, pásate a un gestor online. Por apenas 15€ al mes tienes un servicio cómodo y rápido.
…O no utilices un gestor
Si quieres ahorrar aún más y estás dispuesto a lidiar con facturas y burocracia, puedes pasar del gestor y hacer tú mismo el papeleo. Es un ahorro asegurado a cambio de algo de tu tiempo.
Busca depósitos a la vista con pago de intereses
Los intereses que dan los depósitos a la vista son una miseria. Pero, oye, menos da una piedra. Si vas a tener un dinero (por ejemplo, el del colchón de seguridad) parado, mejor tenerlo ahí que en un sitio donde renta 0.
La cuenta ahorro de ING da algo de interés (no sé si habrá alguna otra que dé más, la verdad).
No descartes mudarte
Ya lo he comentado un par de veces al principio de la guía, pero mudarte es una opción, especialmente si eres joven y más especialmente aún si eres autónomo. Irte a Portugal puede suponer un buen ahorro en impuestos durante una temporada.
👧 Ahorro en niños
Si tienes críos, sabes que suponen un gasto importante. Algunos de estos gastos (su salud, por ejemplo) no se pueden recortar. Pero otros sí. Vamos a ver cuáles son.
Enséñale a ahorrar (y a invertir)
Lo primero y más importante es empezar a educar al chiquillo desde bien pequeño en las virtudes del ahorro y de la inversión. Si consigues meterle esa idea en la cabeza (y es muy fácil, porque a los chiquillos les encanta el dinero), te harán la vida más fácil para todo lo demás.
Reutiliza ropa y calzado
Si tienes varios hijos (o primos) puedes reutilizar la ropa y el calzado. Esto es algo que antes se hacía mucho y se ha dejado de hacer. Pero, si andas corto de dinero, siempre puedes ahorrar un poco por este lado. Si la ropa se cuida bien y es de calidad, aguanta años.
Compra el material escolar necesario
No compres los súper estuches que se venden y que tienen mil cosas que el niño no va a utilizar. Compra sólo lo que necesites y, si puede ser, reutiliza material que tengas por casa.
La mochila, funcional y de calidad
Los niños suelen querer la mochila de moda, de la marca de moda y con los personajes de moda. Y, lógicamente, esa mochila es más cara. Compra una de buena calidad desde el primer momento y le durará años.
Utiliza comparadores de libros de texto
Sí, también existen comparadores de libros de texto para que encuentres la tienda que los vende al mejor precio. Úsalos.
Utiliza el del año pasado
Otra opción, muy común, es utilizar los libros del año pasado. Las matemáticas de la ESO no cambian cada año, pero los libros sí (tremenda mafia tienen montada). Puedes reutilizar los libros de años anteriores sin mayores complicaciones.
Utiliza las ayudas y las subvenciones
Por último, no te olvides de que hay muchas ayudas y subvenciones para el material escolar, los libros de texto y demás. Si ves que andas justo y cumples con los requisitos de la ley, puedes recurrir a ellos.
🐶 Ahorro en mascotas
Si no tienes hijos, quizá tengas mascotas. Así que vamos a echar un vistazo al ahorro que podemos conseguir por ese lado. Ten en cuenta que son consejos para perros, pero vaya, si tienes un dragón de Komodo imagino que algunos de estos consejos también te servirán.
Vamos allá.
Por supuesto, adopta
Lo primero es que, si quieres un perro, te dejes de razas y de compras y adoptes uno. No sólo ahorrarás dinero, sino que darás mejor vida a un perro que no lo está pasando bien y, además, te saldrá mejor, porque los perros de raza son mucho más propensos a enfermedades.
Compra pienso a granel
Mejor un saco de 50 kg que uno de 10, y mejor uno de 100 que uno de 50. Compra el pienso tan a granel como puedas. No se pone malo y, si tienes espacio, te permitirá ahorrar una buena cantidad de dinero.
Compra pienso por Internet
Generalmente, el pienso por Internet sale más barato. No siempre es así, pero no pierdes nada por comprobarlo. Además, puedes encontrar fabricantes que vendan a granel que, de otro modo, no encontrarías.
Apuesta por accesorios y juguetes de calidad
Sea lo que sea lo que le compres, que sea de calidad. De nada le sirve un juguete que al día siguiente está roto. Y, sí, sé que los va a romper todos. Pero algunos duran más que otros. Simplemente, compra uno de calidad que le dure más tiempo.
Juguetes DIY
Otra opción es hacer tú mismo los juguetes. Hay una gran cantidad de tutoriales en YouTube para aprender a hacer este tipo de juguetes para perros con los que se divierten y mejoran su inteligencia (porque son de sacar comida del juguete y cosas así).
Compara veterinarios
La diferencia que puede haber en el precio de un veterinario respecto a otro puede llegar a ser enorme. Conviene, por lo tanto, comparar entre los diferentes veterinarios de tu ciudad y acudir al que mejor precio ofrezca. Para ello, puedes pedir opiniones (o llamar y preguntar).
Llévale al veterinario a primera hora
Siempre que tengas que llevar a tu mascota al veterinario, hazlo a primera hora. Nunca sabes si va a tener que quedarse ingresado, y, en caso de que sea así, es mejor tratar de evitar que pase la noche allí, porque te cobrarán un extra por ello.
Utiliza medicamentos genéricos
Cuando te prescriban medicamentos para tu perro, asegúrate de que sean genéricos. Están obligados a dártelos si los pides, y son tan buenos como los de marca (no siempre es posible por temas de patentes, pero no pierdes nada por probar).
Ten a tu mascota bien atendida y sana
Esto no debería ser ni un consejo de ahorro, pero, como hay gente pa tó, pues mejor dar un argumento económico: cuanto mejor atendida esté tu mascota, menos probable es que se ponga enferma y te cueste un buen dinero curarla.
Baña en casa a tu mascota
Hay muchos centros de lavado de mascotas, pero, en realidad, no cuesta nada lavarlos en casa y te ahorras un buen dinero. Además, es divertido.
Aprende peluquería canina
No todos los perros lo necesitan, pero algunos necesitan cortes de pelo periódicos. Si es tu caso, aprende a hacerlos tú mismo y ahorrarás una buena cantidad de dinero al año.
Haz tú mismo los snacks
Por último, buena parte del dinero que se va en alimentación de las mascotas se va no en el pienso, sino en los snacks que le damos. Puedes reducir ese gasto haciendo tú mismo los snacks (unos cachitos de frankfurt son más que suficiente).
🔍 Otros trucos de ahorro
Para terminar, vamos con algunos otros trucos de ahorro para complementar todos los anteriores, de carácter más genérico:
Automatiza el ahorro
El primer consejo extra seguro que ya lo conoces, pero no puedo no decirlo: Automatiza tu ahorro. Cada primero de mes, manda el dinero de la nómina a un fondo indexado o un robo advisor, a una cuenta de ahorro o a lo que quieras. Pero que sea el primero de cada mes.
Forzarte a vivir con menos conducirá a que vivas con menos. Es así de simple.
Todo dinero extra: a ahorro o a reducir deuda
Cualquier extra que te llegue (una paga extraordinaria, un regalo, un premio, lo que sea) tiene que ir a reducir deuda (con las consideraciones que dijimos en el apartado correspondiente) o a ahorro (en caso de que no tengas deuda).
No te lo gastes tontamente.
Aprovecha el DIY
Compramos demasiado. Vivimos en una sociedad consumista. Esto es así. Si puedes evitar gastar por gastar y puedes hacer tú mismo algunas cosillas, ahorrarás, te divertirás y aprenderás por el camino.
También en los regalos
Muchas veces regalamos auténticas mierdas que a nadie le interesan porque no sabemos qué regalar. ¿Por qué no hacer un regalo DIY en lugar de gastar el dinero en calcetines? Desde luego, será un regalo con mayor valor sentimental.
Conviértete en un manitas
Ser manitas, compensa. Si sabes arreglar o fabricar cosillas, vas a ahorrar una barbaridad. Y, además, nunca sabes cuando ese conocimiento que vayas adquiriendo poco a poco te va a suponer un extra en ingresos.
Deja de fumar
Básico. Si quieres ahorrar como un campeón y eres fumador, hay una forma muy simple de ahorrar 100€ cada mes (o más, a saber cuánto fumas): dejar de fumar.
No te dejes convencer, aunque suenes borde
Si no sabes decir que no, te van a vender cualquier cosa. Así que aprende a decir que no y notarás cómo dejas de gastar dinero en tonterías que no necesitas.
Y hasta aquí la guía lonchafinista para ahorrar al máximo. Menuda parrafada te hemos soltado, ¿eh? Pero bueno, si necesitabas consejos para ahorrar, yo creo que no te van a faltar.
Hola. Me han parecido muy buenas las recomendaciones, hasta que he llegado al punto en el que le dices a la gente que fotocopie libros escolares. Esto atenta contra la propiedad intelectual y se llama piratería. Me parece flipante. Es lo mismo que decirle a tus lectores que vayan al supermercado y roben la comida. Que les saldrá más barato…
Gracias por el comentario Juan José, lo borramos para no crear mal entendidos.